El resultado del partido fue una goleada 4-1 para el Valencia, lo que acercaba notablemente al club ché a la primera final de Champions de su historia. Con Bautista Soler, empresario valenciano de la construcción, como nuevo máximo accionista de la entidad tras su compra de acciones a Paco Roig y demás accionistas minoritarios con el propósito de alcanzar la calma social del club, el técnico Ranieri incorporó al club a cuatro italianos: Marco Di Vaio, Emiliano Moretti, Stefano Fiore y Bernardo Corradi, los dos últimos llegaron de la SS Lazio como parte del pago por el fichaje de Gaizka Mendieta en 2001. Solo el lateral izquierdo Emiliano Moretti se afianzó en el equipo con el paso de las temporadas.